No se que se hicieron,
todo sobre tejas verdes.
como que los barrieron a tiros
como que los pasaron por la parrila
con los reflectores los cegaron
despues de llevarselos en las patrullas
estallo el cerebro, pequeño
instante de Aragon,
la arena del fondo, con las algas,
llenaron sus ojos y sus bocas.
miércoles, 7 de octubre de 2009
sin titulo
escrito por Alejandro Jeldes a las 12:02 a.m.
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4 comentarios:
El poema está centrado, tiene un sujeto absolutamente centrado frente a la tortura que justamente busca descentrar al sujeto. Me gusta que te centres y es raro ese ejercicio en ti, que por lo general abordas miles de descentramientos en tu poesía.
te amo, y eso es desde el descentramiento hasta el centramiento mismo jajaja
Sí, estoy de acuerdo con la Dany, casi diría que no eres tú. La fragilidad de lo referido, de los cuerpos acribillados; ahogados; enterrados; hechos olvidar, contrasta con la fuerte presencia, precisamente, del(os) cuerpo(s) víctima(s). Los fantasmas se materializan y, con ellos el horror del saber que se hicieron.
despues de llevarselos en las patrullas
estallo el cerebro
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