"Muchachas demasiado tiempo contenidas en las ataduras absurdas y peligrosas de una virtud fantástica y de una religión repugnante, imitad a la ardiente Eugenia; destruid, pisotead, con tanta rapidez como ella, todos los preceptos ridículos inculcados por imbéciles padres"

Marqués de Sade

La exhibición. Cuando pequeño me gustaba andar desnudo por la casa,

el patio, el supermercado, la calle, de visita.

Con el tiempo  el cuerpo se volvió agresivo

cuerpo lejano al mío. 

Si estiro las manos no veo mis brazos,

No veo a mis hermanos, se pierde el tiempo

No veo a nadie

No somos hermanos, mis brazos no son míos no

            son tus hermanos   

Somos lejanos a días iguales recogemos

           con distintos brazos

Claro pasado el tiempo

consumió. En exasperante

lectura descanso con los ojos

abiertos.

Decidimos soltarlos como una familia,

los sujetos a y b son hijos de la misma edad,

mientras c tendrá la función de padre y madre.

Al no tener más dinero no pudimos establecer

una familia bien constituida.

En el sótano estamos escondidos,

atados la tierra cae entonces en nuestros hombros

Las viejas cantan esos bailes alegres que del pasado

hablan que hacia allá van.

Que olvidados de todo tienen prisa de caer

La tierra entonces en el lugar de los vivos.

En este lugar te saludo te llevo de paseo.

Nos vamos lejos, para que nos vean,

para que observen

para que el ruido moleste que la suciedad moleste.

a veces hay que vomitar
hasta el alma
para purgar la imbecilidad de sentirse culpable

nuevo año

Porque me detengo y no se avanzar, simplemente me pauso ante todo y caigo libre y de pie aterrizo, pero me tropiezo y ruedo igual. Todo el espacio redondo me acobarda como la primera casa, el primer espacio. Y tenía miedo de todo, porque las persianas de madera pintadas blancas y descascaradas amparan todos esos monstruos de mierda que acosan y te hacen mierda por dentro y por fuera, y no me gustaría volver a ese espacio de miedo primordial porque soy cobarde, y seria desnudarme otra vez, cuando ya estoy caliente y cómodo en este espacio adulto. Y mentira, porque ruedo feliz a la infancia inútil y me quedo ahí amparado en la valentía actual, y pienso en mi espacio perdido, en toda las calles que no recuerdo y en realidad es un espacio perdido, una isla de mierda infértil donde no hay niños ni negocios, ni vecinos ni autos.